Autobiografía Dalia

AUTOBIOGRAFIA

Mi nombre es Dalia Lourdes Gaxiola Vázquez, actualmente tengo 28 años; nací el 12 de Septiembre de 1984 en la Cd. De  Los Mochis, Sin., donde sigo viviendo.

Mis padres son Carmen Vázquez García y Fausto Gaxiola Caro, quienes desde niña me han educado con respeto y cariño.

Soy la más pequeña de la familia, tengo 6 hermanos, 3 hombres y 3 mujeres, mi madre desde siempré nos inculcó el valor de la unión familiar.

Nací unos segundos antes de mi hermana Mariela, mucha gente dice que nos parecemos, sin embargo, a mí parece que somos diferentes físicamente.

Mi educación preescolar duró dos ciclos escolares, el primer año en un kínder que estaba a la vuelta de la esquina y el segundo en la colonia Los Tabachines 2.

Realicé mis estudios de primaria, en la escuela Profr. Marcial Ordoñez, que se encuentra a unas cuadras de donde viví mi infancia. Tengo muy buenos recuerdos de mis maestros, siempre tuve buenas calificaciones y gracias a esto logré formar parte de la escolta oficial.

Después estudié en la Esc. Secundaria Técnica No. 2; fue  una etapa muy bonita ya que tuve grandes amigos quienes aún conservo, una etapa de toda clase de cambios.

Enseguida de esos tres años de educación secundaria, ingresé al CBTis #43.

Desde niña quería ser maestra y también cantante, pero me decidí por la docencia, estudié en la Universidad Pedagógica Nacional, al mismo tiempo que prestaba mi servicio como instructor comunitario en el CONAFE.

Fueron cuatro años de aprendizajes, errores, al igual que grandes satisfacciones.

Posteriormente realicé una maestría en Educación Humanista, en el Instituto Humanista de Sinaloa.

Actualmente realizo mi labor docente en la Esc. Prim. “Revolución” del Ej. Zapotillo No. 1, atendiendo al grupo de 5°. Considero a mis compañeros de trabajo mis amigos, tal vez compartimos más tiempo juntos que con nuestras familias por ser escuela de tiempo completo.

Como maestra espero que mis alumnos logren aprendizajes para la vida,  desarrollen al máximo sus potencialidades, contribuir en su educación integral y de calidad.

Como maestra tengo fallas, sin embargo, sigo actualizándome, preparándome para mejorar.

Uno de mis grandes orgullos es mi familia, mi hija Katherine, mi esposo Xavier, quienes me  llenan de alegría y una que otra vez también me hacen enojar con sus travesuras.

Soy un ser humano, una mujer transparente, aunque quisiera no puedo ocultar lo que siento. Tengo muchas virtudes, pero también defectos,  que poco a poco iré convirtiendo en fortalezas.

Considero que cada día, cada momento es una nueva oportunidad para remendar mis errores, para disfrutar lo que tengo.